El cañón de Santa Elena bajo la Vía Láctea, en el parque Big Bend, Texas
© Stanley Ford/Shutterstoc
A cielo abierto. La frontera natural del río Grande
El cañón de Santa Elena que hoy te mostramos en nuestra foto es la divisoria natural entre México y Estados Unidos, con el río Grande (o río Bravo) en medio. La orilla mexicana pertenece al estado de Chihuahua y la estadounidense forma parte del parque Big Bend, un ecosistema protegido en el oeste de Texas que hoy cumple 75 años desde que fue declarado como tal en 1944.
Esta reserva natural ocupa más de 3.200 kilómetros cuadrados y es una extensión del desierto mexicano, que además oculta fósiles con más de 10.000 años de antigüedad. Seguramente te suene el paisaje, ya que aquí se han rodado innumerables westerns. Pero lo que quizá no sepas es que también es uno de los mejores lugares que hay en el mundo para observar las estrellas, porque la contaminación lumínica es inexistente y la noche cae con total rotundidad. En pocos sitios podrás ver la Vía Láctea con tanto detalle como aquí.