París, Francia
© somchaij/Shutterstoc
¿No es fascinante este punto de vista?. París, Francia
Al caer el crepúsculo, la ciudad de París se ilumina. Las calles, los edificios y los grandes monumentos, como la Torre Eiffel, se iluminan. Durante su reinado, el rey Luis XIV pidió que se instalaran farolas por toda la ciudad para que la policía pudiera atrapar fácilmente a los infractores de la ley, asegurándose de que no hubiera callejones oscuros donde pudieran esconderse. También se pidió a los vecinos que colocaran faroles, lámparas de aceite y velas encendidas en sus ventanas.
Hoy, la Ciudad de las Luces es un destino de ensueño para los viajeros que buscan museos, gastronomía y un entorno romántico. La ciudad tiene mucha historia que ofrecer en forma de jardines, monumentos, catacumbas y mucho más, con volúmenes que aprender sobre la rica cultura francesa y parisina.