Pez pipa anillado cerca de Moalboal, Filipinas
© Jenna Szerlag/Alam
El macho que da a luz
Lo que hoy te mostramos no es un bastón de caramelo que puedas colgar en tu árbol de Navidad, aunque a primera vista lo parezca. Sino un pez pipa anillado, con su gran aleta caudal desplegada a la izquierda de la imagen y su cabeza, que concluye en una boca afilada, a la derecha.
Se trata de una especie tan exótica como frecuente en las aguas tropicales de los mares situados entre el norte de Australia, Japón, Filipinas y la costa este de Sudáfrica. Y pertenece a la misma familia que el caballito de mar. De hecho, si te fijas bien comparten cierto parecido físico, ya que ambos cuentan con una especie de armadura ósea que da forma a sus cuerpos y los protege de agentes externos.
Aunque esa no es la única similitud. En ambas especies, son los machos los que incuban los huevos, después de que las hembras los depositen ya fecundados en la bolsa ventral que tienen sus compañeros bajo la cola. Así que, en cierto modo, podría decirse que son ellos y no ellas quienes que finalmente dan a luz.