Erizo de pecho marrón en un jardín con dientes de león, Bad Driburg, Renania del Norte-Westfalia, Alemania
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Sueños amarillos en un campo verde. Erizo de pecho marrón, Bad Driburg, Renania del Norte-Westfalia, Alemania
La primavera nos regala los olores más bellos y despierta nuestro sentido del olfato tras la larga hibernación invernal. Imagínese la variedad de olores y sabores que pueden percibir los erizos, a diferencia de nosotros. En realidad, es un animal nocturno que duerme en su nido de hojas y hierbas durante el día para explorar su territorio al anochecer. Con sus espinas, olfatea con curiosidad el mar amarillo de las flores de diente de león. Hábil cazador de insectos y pequeños animales, el erizo de pecho marrón contribuye a la diversidad de este ecosistema vivo. Su presencia en los prados añade una dimensión extra de belleza natural a la primavera, ya que recorre su hábitat de forma silenciosa y persistente y ocupa armoniosamente su lugar en la naturaleza. Así que, si te topas con uno de ellos no olvides respetar su espacio y evitar asustarlo o molestarlo para que pueda seguir su camino oliendo flores tan bonitas.