Burbujas heladas en el lago Abraham de Alberta, Canadá
© robertharding/Alam
La belleza del metano. Las burbujas de metano del lago Abraham
Situado en el río Saskatchewan Norte, el lago Abraham es la mayor reserva de agua dulce de la región canadiense de Alberta. No es un lago natural, sino construido por el hombre, aunque el paisaje que dibuja no tiene nada que envidiar al de los lagos helados de las Montañas Rocosas. En invierno, además, atrae a miles de turistas que llegan hasta aquí para comprobar si lo que dice la gente es verdad; que la capa de hielo que se forma al congelarse el agua está repleta de burbujas. Y por supuesto que lo está.
La explicación se encuentra en las bacterias que habitan en el fondo del lago y que se alimentan de materia orgánica muerta, de modo que periódicamente desprenden metano y ese gas termina quedando atrapado en el hielo. El resultado es el sueño de cualquier fotógrafo aficionado, pero has de tener cuidado, porque las burbujas son inflamables, así que no enciendas una cerilla cerca si no quieres llevarte un susto. También sabrás que el metano no es un gas inocuo, y que además contribuye a formar el temido efecto invernadero, aunque evidentemente este lago no es el origen del cambio climático.